
Tambien una reflexion para nosotros:
APOSTOLADO CON CARIDAD Y FILANTROPÍA CON AMOR HUMANO:
En esto radica la diferencia entre el apostolado hecho con caridad y la filantropía movida por el amor humano. La filantropía -que hoy se practica mucho y hace obras muy hermosas en favor de los demás-, es ciertamente honesta; está bien; merece elogio; es una obra humana digna de reconocimiento y llena de valor..... Pero no tiene nada de sobrenatural, porque no procede del amor de Dios, de la caridad. La filantropía es muy diferente del amor cristiano.
San Pablo lo dice de manera categórica, y por duro que parezca: “Aunque yo reparta a los demás todos mis bienes, si no tengo caridad, de nada me aprovecha” (1Co 13,3)
Filantropía y amor son ante Dios como dos flores hermosas: la caridad es flor natural llena de vida divina, mientras que la otra es flor artificial, preciosa, pero carente de la vida de Dios.
En el apostolado Dios nos invita a recibir el amor que Él nos ofrece para desde allí amarle con todo el corazón. Este amor de Dios nos capacita para amarle a Él, para amarnos a nosotros mismos y para amar a nuestros hermanos.
Para que nuestro apostolado sea fecundo amemos a los niños y a nuestros copañeros con mismo amor que Dios nos ama, pero sobre todo buquemos corresponder al amor que Dios nos tiene: "AMOR CON AMOR SE PAGA". Busquemos tambien nuestra propia santificación, recordando que todo en este mundo pasará, pero Dios no pasará; recordando que de Dios somos, de Dios venimos y hacia El vamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario